Esta propuesta, que ocupa un silo de grano en desuso en los Docklands de Londres, aprovecha el tejido industrial abandonado del pasado y celebra el espíritu práctico de la historia del lugar. Se trata de revitalizar la antigua fábrica como medio para deconstruir los objetos cerámicos locales desechados y los residuos de construcción circundantes, como ladrillos, baldosas y hormigón, para utilizarlos como nuevo material para un nexo de talleres experimentales de fabricación de cerámica. Utilizar los escombros de la zona para construir y dar forma al futuro de la zona; la deconstrucción de los residuos en la reconstrucción de la comunidad.