Las ciudades se están calentando y las olas de calor se están volviendo más comunes haciendo que la gente dependa de los aires acondicionados para refrescarse. Este enfoque es demandante de energía, ineficiente y contaminante. El cuello de Saiga que se puede llevar puesto reduce la dependencia de los acondicionadores de aire cambiando nuestra percepción de la temperatura a nuestro alrededor a través de la respiración de aire frío y enfriando el cuello por conducción.