Hoy en día nos enfrentamos a un enorme problema de residuos de materiales sintéticos, porque los productos desechables o de corta duración se fabrican con materiales duraderos. Los envases de ESPUMA DE ALGAS MARINAS pretenden, como mínimo, reducir la contaminación ambiental con residuos sólidos: el material es completamente orgánico, ya que está hecho sólo de algas marinas y agua. Una vez consumido el envase de ESPUMA DE ALGAS MARINAS, el material puede compostarse en casa o utilizarse como fertilizante. Aunque el envase se desechara como residuo, gracias a los procesos naturales y a los microorganismos volvería a formar parte de la naturaleza y no causaría ningún daño al medio ambiente.