El sistema TRIQBRIQ utiliza bloques de construcción de madera micromodulares, conocidos como BRIQ, que se fabrican con madera débil y dañada de bajo coste, así como con madera recuperada. Los BRIQ se ensamblan in situ y se fijan entre sí con tacos de madera para levantar muros de carga para la construcción de edificios de forma rápida y rentable. Gracias a la ausencia de juntas adhesivas y al diseño circular, las BRIQ pueden reutilizarse después de desmontar un edificio. Además, en un armazón de TRIQBRIQ se almacenan cantidades considerables de CO2. (125 - 200 kg de CO2 por metro cuadrado de superficie de pared, dependiendo del sistema).