Pasta Fría parte de una reflexión sobre la práctica del diseño como acción política y agente de cambio en el actual contexto global marcado por la crisis socioambiental. A partir de una investigación material desde una perspectiva circular y de autoproducción se ha utilizado residuos de alimentos, en concreto cáscaras de huevo, y un aditivo alimentario para crear un material biocompuesto para impresión 3D.